7 Aplicaciones en modo consola para Linux

¿Quién ha dicho que un Linux de escritorio tiene por obligación un entorno gráfico? Los más geeks nos movemos bien entre letras y comandos, (sobretodo si has trabajado con servidores) y con el tiempo, se le coje el gusto a no usar el ratón. Pero a veces se echan en falta algunos lujos del entorno gráfico...

Navegadores web (Lynx, w3m), procesadores de texto (VIM, nano), reproductores musicales (MOC, MPD), clientes de BitTorrent y Twitter (rtorrent, Turses), ¡hasta navegadores de archivos! (midnight-commander). Todo esto y más, son herramientas y aplicaciones que podemos encontrar en Linux para utilizar desde la terminal, es decir, sin necesidad de entorno gráfico. ¡No malgastes recursos y siéntete un old school geek!

MOC

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Music on Console. Es el nombre de este reproductor musical en modo texto, que nos permite acceder a la música y navegar por ella a través de carpetas.

Soporta reproducción de streaming (Icecast, Shoutcast), y la mayoría de formatos (MP3,  Ogg Vorbis, FLAC, Musepack, Speex, WAVE, MOD,WavPack, AAC, SID, MIDI). Es extremadamente ligero, y totalmente configurable.

Más información | Sitio web oficial

MPD

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Music Player Daemon, otro reproductor musical en modo texto. Esta vez, OpenSource.

Funciona como servidor, recurriendo a MPC como cliente, lo cual puede ahuyentar un poco al usuario medio, pero como recurso de bajo consumo para centralizar un equipo de sonido, es perfecto.

Al principio puede resultar un poco complejo de manejar, pero es muy completo y funcional.

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rTorrent

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¿Buscas un cliente de BitTorrent de bajo consumo? Desecha la interfaz gráfica y ponte a descargar con rTorrent.

Se trata de una herramienta OpenSource que funciona en modo consola, y que debido a su ligereza e funcionamiento extremadamente rápido, es capaz de sembrar varias veces más rápido que BitTorrent (cliente original). Funciona bajo GNU/Linux, aunque es posible compilarlo y correrlo en casi cualquier sistema UNIX-Like.

Más información | Sitio web oficial

Midnight-Commander

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Navegar usando el comando ls a veces resulta un poco tedioso, ¿por qué no agilizar este trabajo? Midnight-commander nos ayuda en ello.

Permite moverse entre los ficheros de forma visual, manipularlos (renombrarlos, moverlos) e incluye hasta un cliente FTP.

Aunque su interfaz recuerda demasiado a UNIX, se distribuye bajo licencia GPL y, entre sus contras, destaco que no tiene soporte para UTF-8.

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Lynx

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Google visualizado desde Lynx

En este caso, se trata de un navegador web. Un navegador web en modo texto, el cual, tiene sus pros y sus contras. Si te gusta disfrutar de la web con todo su potencial: imágenes, mucho colorido, etc, este no es, sin duda alguna, tu navegador. Pero si por el contrario, navegas por páginas HTML simples y planas, puede serte de gran utilidad debido a su bajo consumo de recursos y su velocidad (si no descargamos imágenes, aprovechamos muchísimo más el ancho de banda).

Lynx es un completo navegador web en modo texto, que nos permitirá movernos por Internet a una velocidad de vértigo. Funciona a su vez como cliente de gopher, un servicio de Internet el cual, nos permite movernos a través de menús. Fue diseñado originalmente para UNIX, pero actualmente se ha trasladado a GNU/Linux, aunque está extendido para otras plataformas como Windows, OS/2, BeOS, etc.

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Turses

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Turses es un cliente de Twitter en modo texto. Es increíblemente rápido y su consumo de recursos es casi nulo, además de incorporar multicolumnas.

Sin duda, el cliente preferido de los más geeks :P Te permite leer tu timeline cómodamente y sin demasiadas florituras.

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Nano

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¿Como olvidarme de este editor de texto tan genial? Aunque muchos prefieran y recurran a VIM por su potencial, nano sigue siendo mi preferido. Es simple, intuitivo, funcional, e incorpora resalto de la sintaxis, lo cual, a la hora de escribir scripts lo convierte en mi editor por excelencia.

Por defecto viene instalado en los sistemas GNU/Linux y puedes arrancarlo con

# nano

¿Utilidad? A nivel de escritorio, realmente poca, pero como herramientas cuando tienes un equipo con pocos recursos y quieres aprovechar (Raspberry Pi, por ejemplo) si te atreves con el modo texto, puedes sacarle mucho partido.